Niño de 3 años muere tras tocar cable en mal estado: ¿Negligencia o fatalidad?
En un hecho que ha conmocionado a todo el Magdalena, un pequeño de apenas tres años perdió la vida tras sufrir una descarga eléctrica en su propia casa. El corazón de la comunidad se ha roto ante la noticia del fallecimiento de Daniel Steven Rodríguez Escobar, quien tocó un cable en mal estado que le causó un paro cardiorrespiratorio fulminante. ¿Cómo pudo ocurrir esto? ¿Hubo negligencia? Las autoridades ya investigan. Niño de 3 años muere tras tocar cable en mal estado
El trágico suceso ocurrió en la mañana del lunes en el corregimiento de San Miguel, El Banco, cuando el menor, que estaba bajo el cuidado de su madre y otros familiares en su vivienda del barrio La Playa, entró en contacto con un cable que tenía una sección expuesta. La descarga fue tan fuerte que, a pesar de los esfuerzos de sus familiares y vecinos por socorrerlo, el pequeño llegó sin signos vitales al Centro de Salud Samuel Villanueva Valest. Posteriormente, fue trasladado a la Clínica Prevención y Salud, donde los médicos confirmaron su fallecimiento.
¿Qué pasó realmente?
Según el relato del padre del menor, él se encontraba trabajando cuando recibió la devastadora noticia. Mientras tanto, el niño estaba en casa, aparentemente seguro, pero un simple descuido o una falla en la infraestructura eléctrica terminó en una tragedia irreparable. Familiares y vecinos intentaron reanimar al pequeño, pero la descarga fue demasiado fuerte. ¿Era el cable un peligro latente que nadie notó? ¿Podría haberse evitado esta muerte?
Investigan posible negligencia
Las autoridades no han tardado en actuar. El Laboratorio Móvil de Criminalística se encargó del levantamiento del cuerpo y los procedimientos forenses, mientras que el Grupo de Infancia y Adolescencia, junto con la Sijín y el Sipo, han iniciado una investigación exhaustiva. El objetivo es claro: determinar si hubo negligencia por parte de los adultos responsables o si la infraestructura eléctrica de la vivienda presentaba fallas que pusieron en riesgo la vida del menor.
Este caso ha levantado una ola de indignación y dolor en la comunidad. Vecinos y amigos del pequeño Daniel no pueden creer lo sucedido. “Era un niño tan alegre, siempre jugando. No podemos entender cómo algo así pudo pasar”, comentó una vecina entre lágrimas. La pregunta que todos se hacen es: ¿Cómo evitar que algo así vuelva a ocurrir?
Advertencia para todos los hogares
Este trágico incidente sirve como un llamado de atención para todos los hogares. Los cables en mal estado, las conexiones eléctricas inseguras y los enchufes sin protección pueden convertirse en asesinos silenciosos, especialmente para los más pequeños, quienes por su curiosidad natural están más expuestos a sufrir accidentes. Expertos recomiendan revisar periódicamente las instalaciones eléctricas y mantener los cables en buen estado, lejos del alcance de los niños.
Ojo con la seguridad en el Hogar!
Mientras la comunidad llora la pérdida de Daniel, las autoridades continúan su investigación. ¿Se determinará que hubo negligencia? ¿O se tratará de un trágico accidente? Por ahora, lo único claro es que una familia está destrozada y una comunidad entera está de luto.
Este caso nos recuerda la importancia de priorizar la seguridad en el hogar, especialmente cuando hay niños pequeños. No podemos permitir que más vidas se pierdan por descuidos que, con un poco de atención, podrían evitarse. ¡Comparte esta historia para crear conciencia y evitar más tragedias!
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